Tradiciones de mayo: celebrando el día de la madre entre flores, devoción y cruces
Este año, el día de la madre se convirtió en una oportunidad para dar paso a la creatividad y sostenibilidad. Utilizamos materiales reciclados para crear joyeros únicos, adornados con tapaderas en forma de flor, simbolizando el arranque del mes de las flores. Este gesto no solo reconoce la importancia de nuestras madres en nuestras vidas, sino que también mantiene la esencia que el mes de mayo inspira.
El altar del día de la cruz en nuestra residencia
Coincidiendo con el día de la cruz, preparamos un altar que rememora la esencia de esta tradición. La cruz, adornada como la imagen que mostramos, junto con una estatua de la virgen, se crea como centro de nuestro homenaje. Rodeada de flores frescas recogidas del patio por los residentes y de los ramos recibidos durante el día de la madre, el altar no solo es un símbolo de nuestra fe, sino también del centro y el amor compartido.
Una tarde de oración y canto
Cada tarde, los residentes se reúnen para rezar el rosario y cantarle a la virgen. Estos momentos de oración y música no solo refuerzan nuestra fe, sino que también fortalecen los lazos entre nosotros, tradición que resalta la importancia de la residencia y el apoyo mutuo en nuestras actividades.
Tradición en mayo
Mayo es un mes de reflexión, creatividad y unión. A través de actividades que combinan el reciclaje, la fe y el canto, no solo celebramos a las figuras maternas y nuestras tradiciones religiosas, sino que también promovemos un espíritu de sostenibilidad y unidad. Estas celebraciones son una prueba del respeto y amor que compartimos, fortaleciendo nuestro sentido de pertenencia.